El grupo de jzioquitarrak ya tiene la lista de qué merece y no merece la pena llevar en la mochila… y ya está tramando cómo meter esa cosa que no está en lista de esenciales, pero que terminará llevando, porque somos así, ¡qué le vamos a hacer! También nos gusta soñar y no podemos dejar de pensar en lo que tenemos por delante: ¡407 km a pie!, las siete provincias de Euskal Herria en un solo mes, bosques, montañas, mar, valles, viejos y nuevos amigos, agujetas, 24/7 en euskera, risas, el grupo de sherpas, visitantes… Mirando la lista, no es de extrañar que no se pueda sentir una sola emoción. Además, todas las emociones son legítimas, tal y como veremos durante la expedición.

Consigamos o no meter en las mochilas esa cosa que se nos ha metido entre ceja y ceja, lo que no podemos evitar es llenarla de sueños. Los sueños, además, alivian el peso. Cuanto más sueñan, más ligero camina el grupo de jzioquitarrak.

Y tú, ¿has soñado suficiente?